Un descuento es como cuando vas a la tienda de caramelos y descubres que tu caramelo favorito cuesta menos de lo habitual. Normalmente, necesitas tres monedas para comprarlo, pero hoy solo necesitas dos monedas. Eso es porque la tienda te está dando un trato especial. Es como un pequeño regalo de la tienda para hacerte feliz y ayudarte a ahorrar tus monedas.
Piensa en ello como cuando tienes una pila de bloques de construcción. Normalmente, necesitas diez bloques para hacer una torre, pero hoy solo necesitas ocho bloques. Es como un atajo para construir tu torre más rápido y con menos bloques.
Imagina que estás jugando un juego donde necesitas recolectar estrellas para ganar. Normalmente, necesitas cinco estrellas, pero hoy solo necesitas cuatro estrellas para ganar. Esto es porque el juego te está dando un bono para facilitarte ganar. Eso es lo que se siente un descuento; es una pequeña ayuda para obtener lo que quieres con menos esfuerzo.