Cuando esperas algo realmente emocionante, como recibir un globo grande y brillante, y luego descubres que el globo no está allí, o que se ha roto, puedes sentirte decepcionado. Es como cuando piensas que vas a tener una bola de tu helado favorito, pero luego descubres que la tienda está cerrada. Esa sensación que tienes, cuando las cosas no salen como esperabas, se llama estar decepcionado.
Imagina que estás construyendo una torre alta con tus bloques, y piensas que será la torre más alta de todas. Pero luego, de repente, la torre se cae. Esa sensación que tienes cuando la torre se cae y deseas que no hubiera caído, es la decepción. Es cuando realmente, realmente querías que algo sucediera, pero no sucedió.
Piensa en cuando estás dibujando un cuadro, y esperas que se vea como un arco iris. Pero cuando terminas, los colores no son tan brillantes como querías. Esa pequeña tristeza o decepción que sientes es lo que significa estar decepcionado. Está bien sentirse así, y le pasa a todo el mundo a veces.