deseo
El deseo es como una mariposa dentro de tu barriga. Cuando ves una galleta deliciosa, la mariposa aletea porque quiere probarla. Te hace sentir emocionado y cosquilleante. El deseo es esa sensación de aleteo cuando realmente quieres algo.
Imagina que tu corazón es un cofre del tesoro. Cuando deseas algo, es como encontrar una moneda brillante que realmente quieres agregar a tu cofre. Cuanto más piensas en ello, más brillante se vuelve, y no puedes esperar para tenerlo en tu colección.
Piensa en el deseo como un imán. Cuando ves algo que quieres, como un juguete nuevo, el imán en tu corazón te atrae hacia él. Cuanto más fuerte es el deseo, más fuerte tira el imán, haciéndote sentir que simplemente tienes que tenerlo.
El deseo también es como una semilla en un jardín. Cuando deseas algo, es como plantar una semilla en tu mente. La riegas pensando en ella, y crece más y más hasta que no puedes esperar a verla florecer.