Un curso es como un mapa del tesoro que te guía en una aventura para aprender algo nuevo. Al igual que un mapa te muestra el camino para encontrar un tesoro escondido, un curso te muestra los pasos para descubrir nuevos conocimientos o habilidades. Puede tener diferentes paradas en el camino, como aprender sobre números, letras o cómo pintar un cuadro. Cada parada es como un pequeño cofre del tesoro lleno de cosas emocionantes para aprender.
Piensa en un curso como una receta para hacer un delicioso pastel. Comienzas con todos los ingredientes, como harina, azúcar y huevos, al igual que comienzas un curso con toda la información y actividades que necesitas. La receta te dice cómo mezclar todo paso a paso, al igual que un curso te ayuda a aprender poco a poco hasta que creas algo maravilloso.
Un curso también puede verse como un viaje en un tren mágico. Subes al tren, y te lleva a través de diferentes estaciones, cada una enseñándote algo especial. Al final del viaje, has viajado a través de un mundo de conocimientos, y sabes mucho más que cuando empezaste.