La conciencia es como una pequeña voz dentro de tu cabeza que te ayuda a saber qué es correcto y qué es incorrecto. Es como un superhéroe que siempre quiere que hagas cosas buenas, como compartir tus juguetes o pedir perdón cuando lastimas a alguien. Este superhéroe te ayuda a tomar decisiones que te hacen sentir feliz y seguro a ti y a los demás.
Piensa en la conciencia como un semáforo en tu corazón. Cuando estás a punto de hacer algo bueno, muestra una luz verde, diciéndote que sigas adelante. Pero si estás a punto de hacer algo no tan amable, se pone rojo, diciéndote que te detengas y pienses de nuevo. Esto te ayuda a tomar decisiones que son amables y justas.
La conciencia también puede ser como una brújula. Al igual que una brújula te señala la dirección correcta cuando estás perdido, tu conciencia te guía para tomar buenas decisiones. Te ayuda a encontrar tu camino cuando no estás seguro de qué hacer, para que puedas ser una persona amable y considerada. Recuerda, escuchar a tu conciencia te hace sentir orgulloso y feliz por dentro.