La confrontación es como cuando dos personas están jugando con bloques y ambas quieren el mismo bloque al mismo tiempo. Pueden sentirse molestas o enojadas porque ambas quieren construir su torre con ese bloque. Es como una pequeña tormenta de sentimientos dentro de ellas. A veces, pueden usar palabras para decirse cómo se sienten, como decir ‘¡Necesito ese bloque!’ Esta es una forma de intentar resolver el problema.
Otra forma de pensar en la confrontación es como dos superhéroes que tienen diferentes ideas sobre cómo salvar el día. Ambos quieren ayudar, pero tienen diferentes planes. Pueden hablar entre ellos para encontrar la mejor manera de trabajar juntos. Necesitan usar sus palabras y escucharse uno al otro para asegurarse de que todos estén contentos al final.
A veces, la confrontación puede sentirse como un juego de tira y afloja. Cada persona tira de su lado de la cuerda porque quiere ganar. Pero al final, pueden darse cuenta de que si trabajan juntos, pueden ganar ambos creando algo aún mejor.