Un concepto es como una gran idea en tu mente. Imagina que tienes una gran caja donde guardas todos tus juguetes favoritos. Cada juguete es diferente, pero todos pertenecen a la caja porque son tus favoritos. Un concepto es como esa caja, y los juguetes son las ideas más pequeñas que caben dentro. Por ejemplo, el concepto de ‘animales’ incluye muchas criaturas diferentes como perros, gatos y elefantes. Todos son diferentes, pero encajan en la gran idea de ‘animales’.

Piensa en un concepto como una receta. Si quieres hornear un pastel, necesitas saber qué es un pastel. La receta te dice qué ingredientes necesitas y cómo mezclarlos. El concepto de un pastel te ayuda a entender que un pastel es dulce, horneado y a menudo redondo. Incluso si cambias algunos ingredientes, como usar chocolate o vainilla, sigue siendo un pastel porque encaja en el concepto.

Un concepto es también como un mapa. Cuando miras un mapa, ves carreteras, ríos y ciudades. El mapa te ayuda a entender dónde está todo. De manera similar, un concepto te ayuda a entender y organizar diferentes ideas en tu mente, como un mapa organiza los lugares.