El color es como una caja de crayones mágicos dentro de tus ojos. Cuando miras el mundo, tus ojos usan estos crayones para pintar todo lo que ves. Cada crayón tiene un nombre especial como rojo, azul o verde. Estos colores te ayudan a saber cuándo el cielo es azul, las manzanas son rojas o el césped es verde.

Imagina que tus ojos son como una cámara. Esta cámara ve la luz rebotando en las cosas a tu alrededor. Dependiendo de cómo rebota la luz, tus ojos ven diferentes colores. Es como cuando iluminas una pared con una linterna y ves que el color de la luz cambia.

Los colores son como los sabores del mundo. Así como el helado puede saber a chocolate o vainilla, los colores pueden hacer que las cosas se vean felices o tristes. Un día soleado se siente brillante y alegre gracias al sol amarillo, mientras que un día lluvioso puede sentirse tranquilo y fresco con nubes grises.

Piensa en los colores como la música para tus ojos. Al igual que la música puede ser fuerte o suave, los colores pueden ser brillantes como un camión de bomberos o suaves como un gatito. Hacen que el mundo sea emocionante y lleno de sorpresas.