Piensa en un cúmulo como un grupo de amigos. Al igual que los amigos se juntan porque les gustan las mismas cosas, un cúmulo es cuando las cosas están cerca unas de otras porque tienen algo en común. Por ejemplo, si tienes un montón de caramelos de colores y pones todos los rojos en un montón y todos los azules en otro, cada montón es un cúmulo de caramelos del mismo color.
Otra forma de pensar en un cúmulo es como estrellas en el cielo. Si miras el cielo nocturno, podrías ver un montón de estrellas que están muy cerca unas de otras. Esas estrellas están en un cúmulo. Parecen pertenecer juntas porque están tan cerca, ¡como una familia de estrellas!
Imagina un cúmulo como un jardín donde las flores del mismo color crecen juntas. Las rosas rojas están en una esquina, los girasoles amarillos en otra, y las violetas en otro lugar. Cada grupo de flores es un cúmulo porque se quedan con sus amigos de color. Los cúmulos nos ayudan a ver patrones en las cosas, al igual que puedes ver dónde está cada tipo de flor en el jardín.