clasificar
Clasificar es como jugar a un juego de ordenar con tus juguetes. Imagina que tienes una gran caja de juguetes, y quieres poner todos los coches en un contenedor, todas las muñecas en otro, y todos los bloques en uno diferente. Cuando clasificas, estás poniendo cosas que son parecidas en el mismo grupo, como encontrar todos los bloques rojos y ponerlos juntos. Es como hacer pequeñas familias de cosas que son iguales.
Otra manera de pensar en clasificar es como hacer un arco iris. ¿Sabes cómo un arco iris tiene todos los colores en un orden especial? Cuando clasificas cosas, las estás poniendo en orden, como los colores en el arco iris. Así que, si tienes un montón de crayones, puedes alinearlos de más claro a más oscuro o por sus colores, como rojo, naranja, amarillo, y así sucesivamente.
Clasificar también es como ser un detective. Miras pistas, como el tamaño, la forma o el color, para descubrir qué cosas van juntas. Es como resolver un pequeño rompecabezas, donde decides qué pertenece a qué, asegurándote de que todo esté en el lugar correcto.