Un siglo es como un gran pastel de cumpleaños con 100 velas encima. Cada vela representa un año, al igual que tienes un cumpleaños cada año. Cuando cuentas todas las velas de 1 a 100, tienes un siglo. Es como contar todos los días hasta llenar un calendario grande con 100 páginas, cada página siendo un año.
Piensa en un siglo como un tren largo con 100 vagones. Cada vagón es un año, y todos están conectados para que el tren avance mucho. Cuando el tren tiene los 100 vagones, ha viajado un siglo de tiempo por las vías.
También puedes imaginar un siglo como un libro de cuentos largo con 100 capítulos. Cada capítulo cuenta la historia de un año, y cuando terminas de leer todos los capítulos, has leído un siglo de historias.
Un siglo también puede ser como un jardín con 100 flores diferentes. Cada flor florece durante un año, y cuando todas las flores han florecido, el jardín ha estado vivo durante un siglo.