Una vela es como una pequeña luz en un palo. Imagina el sol, pero mucho, mucho más pequeño, y puedes sostenerlo en tu mano. Una vela está hecha de cera y tiene un pequeño trozo de cuerda dentro llamado mecha. Cuando enciendes la mecha con fuego, produce una pequeña luz amigable que puede ayudarte a ver en la oscuridad. Es como tener un pequeño sol en tu habitación que puedes controlar.
Piensa en una vela como un ayudante de pastel de cumpleaños. ¿Sabes cómo soplas las velas en tu pastel de cumpleaños? Cada vela es como una pequeña animadora, celebrando contigo y haciendo que tu pastel se vea mágico. Cuando enciendes las velas, bailan y parpadean, agregando un brillo especial a tu día especial.
Las velas también pueden ser como una luz nocturna para tus sueños. Cuando te sientes un poco asustado en la oscuridad, una vela puede ser tu amigo brillante. Se mantiene alta y brillante, alejando las sombras y haciéndote sentir cómodo y seguro. Es un abrazo cálido de luz que susurra, “Todo está bien.”