mover
Cuando piensas en la palabra ‘mover’, imagina intentar mover un gran oso de peluche que simplemente no se mueve. Es como cuando empujas y empujas, pero el oso de peluche se queda justo donde está. Eso es lo que significa cuando algo no quiere moverse. ¡No quiere moverse ni un poquito!
Imagina una puerta terca que quieres abrir. Giras y giras la manija, pero la puerta simplemente se queda. No importa cuánto lo intentes, no se moverá. Es como si la puerta dijera: ‘¡No, me quedo aquí!’ Esa es otra forma de entender mover.
Ahora, piensa en un momento en que estás sentado en el sofá y alguien te pide que te muevas. Te desplazas solo un poquito para hacer espacio. Ese pequeño desplazamiento es lo que significa mover. A veces, no se trata de moverse mucho, solo un pequeño empujón o movimiento puede ser un mover.
Finalmente, imagina un gato dormilón que no quiere levantarse. Llamas su nombre, pero solo se estira y se queda en su lugar. Aunque intentes que se mueva, el gato no se moverá. Está contento justo donde está, al igual que algunas cosas que son difíciles de mover.