Un pecho es como un tipo especial de almohada que algunas personas tienen en su pecho. Es suave y puede tener diferentes tamaños y formas, al igual que las almohadas pueden ser grandes o pequeñas, redondas o cuadradas. Estas almohadas son importantes porque ayudan a alimentar a los bebés. Cuando un bebé tiene hambre, puede beber leche del pecho, al igual que tú bebes leche de una taza. Esta leche es muy saludable y ayuda al bebé a crecer fuerte y feliz.
Piensa en un pecho como un cofre del tesoro que guarda leche nutritiva para los bebés. Al igual que un cofre del tesoro guarda cosas valiosas de manera segura, un pecho guarda la leche de manera segura y lista para el bebé cuando la necesita. Esta leche es como una poción mágica que ayuda al bebé a volverse sano y fuerte.
Los pechos también son como instrumentos musicales. Pueden hacer sonidos especiales cuando un bebé bebe leche. El bebé se siente consolado y amado, al igual que escuchar música puede hacerte sentir feliz y tranquilo. Por lo tanto, los pechos no solo sirven para alimentar, sino también para hacer que los bebés se sientan amados y cuidados.