Cuando piensas en la palabra descanso, imagina un juguete que puede desmontarse. A veces, cuando juegas demasiado fuerte, un juguete puede romperse en pedazos. Esto significa que deja de funcionar como solía hacerlo. Pero no te preocupes, porque a veces puedes volver a armarlo, como un rompecabezas.
Ahora, piensa en un día soleado cuando estás jugando afuera. De repente, necesitas tomar un descanso. Esto significa que dejas de jugar por un momento para descansar y recuperar el aliento. Al igual que cuando pausas un juego, puedes volver renovado y listo para divertirte más.
Imagina una larga fila de bloques coloridos de pie como un tren. Si rompes la fila, significa que quitas algunos bloques, y el tren deja de ser una línea larga. Pero siempre puedes construir una nueva línea con los bloques.
Finalmente, imagina que estás escuchando una historia. Si alguien dice: ‘Tomemos un descanso para un bocadillo’, significa que pausas la historia para disfrutar de algo delicioso. Una vez que termines, puedes comenzar la historia de nuevo, como pasar la página de un libro.