lluvia de ideas
Piensa en tu cerebro como una gran sala de juegos llena de juguetes coloridos. Cuando haces una ‘lluvia de ideas’, es como abrir la caja de juguetes y dejar que todos los juguetes salgan a jugar. Cada juguete es una idea diferente, y todos salen a jugar juntos. No te preocupas por lo desordenado que se ponga; solo dejas que todas las ideas reboten y se diviertan.
Otra forma de pensar en la lluvia de ideas es como una tormenta de lluvia. Imagina tu cerebro como una gran nube esponjosa. Cuando haces una lluvia de ideas, es como si la nube comenzara a llover muchas pequeñas gotas de agua. Cada gota es una nueva idea, y todas caen juntas, llenando el suelo de nuevos pensamientos y posibilidades.
La lluvia de ideas también es como una búsqueda del tesoro. Tu cerebro es el mapa, y cuando haces una lluvia de ideas, buscas tesoros escondidos—¡nuevas ideas! A veces encuentras tesoros brillantes y emocionantes, y a veces encuentras tesoros divertidos o graciosos. Pero cada tesoro es importante, y todos te ayudan a encontrar las mejores ideas.
Así que, cuando haces una lluvia de ideas, dejas que tu cerebro juegue, haga llover ideas y busque tesoros.