Una tarea es como un trabajo especial o una misión que alguien te da para hacer. Es como cuando tu maestro te pide que dibujes un retrato de tu familia o cuando tu mamá te pide que recojas tus juguetes. Estas son tareas porque alguien te ha dicho qué hacer.
Piensa en la tarea como una búsqueda del tesoro. Tienes un mapa y debes seguirlo para encontrar el tesoro. El mapa es como las instrucciones de tu tarea, y el tesoro es la tarea terminada. Debes seguir cada paso para llegar al final, al igual que sigues las pistas en un mapa del tesoro.
Otra forma de pensar en la tarea es como hacer un pastel. Necesitas reunir todos los ingredientes, como harina, huevos y azúcar, y seguir una receta. La receta te dice qué hacer paso a paso, al igual que una tarea te dice cómo completar una misión. Cuando terminas, tienes un delicioso pastel o una tarea terminada para mostrar tu arduo trabajo.
Las tareas nos ayudan a aprender cosas nuevas y a practicar lo que ya sabemos. A veces pueden parecer difíciles, pero nos hacen más inteligentes y nos ayudan a crecer.