La ansiedad es como cuando estás a punto de bajar por un gran tobogán en el parque y tu barriga se siente toda revoloteante. Es ese sentimiento cuando no estás seguro si deberías estar emocionado o un poco asustado. La ansiedad es cuando tu cerebro intenta prepararse para algo, pero no está seguro si debería estar feliz o preocupado.
Otra forma de pensar en la ansiedad es como tener una pequeña nube meteorológica sobre tu cabeza. A veces está soleado y te sientes bien, pero otras veces la nube se oscurece y te sientes un poco nervioso. Esta nube puede hacerte sentir como si tuvieras mariposas en el estómago o como si necesitaras tomar la mano de alguien.
Piensa en la ansiedad como una alarma de superhéroe. Cuando algo nuevo o diferente sucede, la alarma se activa para mantenerte seguro. Pero a veces, la alarma puede ser demasiado fuerte, incluso cuando no hay nada de qué preocuparse. Es entonces cuando necesitas tomar respiraciones profundas o hablar con alguien que pueda ayudarte a calmarte. Recuerda, todos sienten ansiedad a veces, y está bien pedir ayuda cuando la necesitas.