A veces, cuando una parte del cuerpo como un brazo o una pierna está muy, muy herida o enferma, los médicos pueden necesitar quitarla para ayudar al resto del cuerpo a permanecer saludable. Es como cuando tienes un juguete con una rueda rota que no se puede arreglar, es posible que necesites quitar esa rueda para que el juguete pueda funcionar correctamente.
Piensa en tu cuerpo como un árbol. Si una de las ramas está gravemente dañada por una tormenta, es posible que ya no crezca y podría enfermar al resto del árbol. Por lo tanto, los jardineros pueden necesitar cortar la rama mala para mantener el árbol fuerte y saludable.
Otra forma de entenderlo es pensando en un rompecabezas. Si una pieza está rota o ya no encaja, es posible que necesites quitarla para que el resto del rompecabezas se vea bonito y completo. Los médicos hacen algo similar cuando amputan; se aseguran de que el cuerpo pueda funcionar lo mejor posible, incluso si falta una parte.