Cuando sientes un fuerte gusto por algo, como tu juguete favorito o helado, eso se llama una afinidad. Es como un imán que se siente atraído por el metal. El imán tiene una afinidad por el metal, al igual que tú tienes una afinidad por tus cosas favoritas. Podrías tener una afinidad por jugar con tu perro porque te hace feliz, o podrías tener una afinidad por dibujar porque es divertido para ti.
Piensa en un girasol que siempre se gira para mirar al sol. La flor tiene una afinidad por la luz del sol. Le encanta tanto el sol que lo sigue a través del cielo. Podrías sentir lo mismo por tu mejor amigo. Siempre quieres jugar con ellos porque tienes una afinidad por ellos.
Imagina una abeja zumbando alrededor de una hermosa flor. La abeja tiene una afinidad por la flor porque obtiene néctar dulce de ella. De la misma manera, podrías tener una afinidad por leer libros porque te cuentan historias emocionantes. La afinidad es sobre lo que amas y te sientes atraído.