La publicidad es como cuando quieres contarle a todos sobre tu nuevo juguete. Haces un cartel colorido con letras grandes y brillantes y una imagen de tu juguete. Colocas este cartel en todas partes, como en el refrigerador o en tu habitación, para que todos puedan verlo y saber lo increíble que es tu juguete.
Imagina un desfile donde las personas llevan grandes carteles y gritan sobre algo emocionante. La publicidad es como ese desfile, pero en lugar de personas, hay imágenes y palabras en revistas, en la televisión o en internet, contando a todos sobre algo nuevo y divertido.
Piensa en la publicidad como una historia que cuentas a tus amigos cuando tienes algo genial para compartir. Usas tus mejores palabras y tal vez incluso algunos dibujos divertidos para hacerlos realmente interesados. La publicidad funciona de la misma manera, usando imágenes y palabras para entusiasmar a las personas sobre un nuevo juego, un snack sabroso o un lugar divertido para visitar.